La Clase trabajadora retoman la lucha en una fecha clave donde han mantenido el "año de la resi

Una lucha a dos tiempos. La clase trabajadora y el oficialismo político libraron ayer una más de las batallas que han mantenido en el "año de la resistencia", como denominaron al 2015 los movimientos obreros. Y que, de cara al segundo y definitivo debate sobre las enmiendas constitucionales en la Asamblea Nacional, promete abrir nuevos escenarios de confrontación, entre los cuales se cuenta un nuevo paro nacional, convocado para el jueves 26 de noviembre.

El 15 de noviembre de 1922, cuando decenas de trabajadores fueron masacrados y, según la historia, arrojados a la profundidad del Guayas, revive cada año sin mayor connotación. En el centro de Guayaquil, cerca de la otrora zona del cacao, donde la mayoría de los civiles fueron acribillados, no quedan rastros conmemorativos ni interés ciudadano.

Álvaro Quimí vive en la calle Rocafuerte, donde tuvo lugar la barbarie. El 15 de noviembre "no me suena", confiesa, consultado por este Diario. Ni él ni su vecina Mónica Morán ni el esposo de esta, Vicente, pueden dar cuenta o parecen interesados en el fondeo de guayaquileños que lucharon por los derechos laborales que hoy ellos disfrutan. Cuando asoma en la conversación el título de 'Las cruces sobre el agua', la insigne novela de Joaquín Gallegos Lara sobre la tragedia, entonces el "aaaah, claro" o el "ya, pues sí" o el seco "lo de la matanza" contextualizan una verdad: este hecho histórico se diluye. Cada vez más.